Aunque aún estamos en otoño, los cambios de temperatura se suceden a veces tan rápido que el organismo se ve obligado a hacer más esfuerzos para mantenerse sano y en buenas condiciones, tanto por dentro como por fuera. Por eso, nuestro equipo médico te trae estos consejos de salud para el frío.
Menos horas de luz
Puede que haya días de sol y temperaturas agradables para la época o temporales de lluvia y nieve con mucho frío. Sea cual sea la situación, siempre hay que mantener la temperatura corporal a unos 36 °C. Lo que es seguro es que las horas de luz van a ir disminuyendo hasta el solsticio de invierno, el 21 de diciembre de este año, para luego ir aumentando hasta el equinoccio de primavera en marzo.
Con muchas horas de oscuridad en relación a las de luz, nuestro cerebro y glándulas van a entrar en un estado de funcionamiento a ritmo lento, con un tono vital más bajo y necesitas darle más horas de sueño y descanso junto con alimentos más calientes y calóricos.
Cambia tu rutina
Para evitar que el cuerpo se vaya agotando poco a poco y nos quedemos sin pilas en invierno, hay que dormir 8 o más horas al día, porque el otoño y el invierno son épocas destinadas al descanso y la recuperación del desgaste provocado por la actividad de la primavera y el verano.
En la dieta hay que tomar más sopas, caldos, cremas y purés, verduras calientes, mejor las que crecen bajo tierra (patata, zanahoria, cebolla, ajo, remolacha) y las de fruto (calabaza, calabacín). También hay que comer cereales, mejor integrales, como el arroz, trigo, centeno, quinoa o maíz, en grano, pasta, fideos, copos o sémolas, y siempre hay que servirlos calientes. Y no te olvides de las legumbres como las lentejas, los garbanzos o las judías, de las que hay muchas variedades locales y otras como el azuki o soja roja, que son muy nutritivas y cubren muchas de las necesidades de cada día.
Prueba a añadir a las comidas algunas especias como el pimentón, el jengibre o la canela, que van a calentar el cuerpo en los días de frío. Y para las vitaminas no hay que las frutas de temporada. Podemos aportar también supernutrientes como el jugo de aloe vera de Green Frog que se pueden tomar de 1 a 3 vasitos al día durante todo el año.
No hay que olvidar mantener al cuerpo en forma realizando una actividad física habitual, como correr, nadar, bicicleta, ir al gimnasio o hacer algún deporte.
No te olvides de la piel
Y para que la piel no sufra las inclemencias del tiempo frío y seco, aplica la crema Vera Green Dermo Bio para evitar que la piel se agriete, se seque o se deteriore. Se puede aplicar en las manos antes de salir de casa y al volver, pero también en la piel de los brazos y las piernas para conseguir el mismo efecto. Para la cara y el cuello, la crema Vera Green Dermo Cosmética, de 1 a 3 veces al día.
Con frecuencia el frío provoca grietas en las manos y los pies y para curarlas utilizaremos la crema Vera Green Dermo Therapeutic sobre todas las zonas afectadas, de 1 a 5 veces al día según se necesite, y lo mismo en el caso de heridas, lesiones y dermatitis.