5 hábitos para tratar la incontinencia urinaria

La alimentación y algunos ejercicios pueden ayudar a aliviar los síntomas de la incontinencia urinaria. Si bien es necesario acceder a otros tratamientos, estos simples hábitos pueden mejorar esta condición. Te contamos cuáles son.
5 hábitos para tratar la incontinencia urinaria

La incontinencia urinaria es una condición que se caracteriza por la pérdida del control de la vejiga. Puede ser leve, cuando las fugas de orina son menores, o grave, cuando la vejiga se vacía completamente.

Aunque el tratamiento puede variar en función de la causa subyacente, existen algunas medidas básicas que pueden contribuir a su control. En esta oportunidad, compartimos 5 hábitos que podrían contribuir a mejorar la incontinencia urinaria.

Hábitos para tratar la incontinencia urinaria

La pérdida de control de la vejiga puede estar causada por muchos problemas de salud. De hecho, la incontinencia urinaria no es una enfermedad en sí, sino más bien un síntoma. En este, los escapes de orina son repentinos y pueden ocurrir al toser, estornudar o hacer algún tipo de fuerza.

Inclusive, algunos pacientes lo desarrollan de forma severa y lo experimentan como una necesidad fuerte de orinar. Ahora bien, independientemente de su causa o severidad, todos pueden poner en práctica estos sencillos hábitos. ¡Descúbrelos!

1. Hacer cambios en la dieta

El consumo de determinados alimentos de tipo picantes o azucarados aumentan las ganas de orinar.

Una de las claves para tratar la incontinencia urinaria es mejorar la alimentación. Si bien muchos lo ignoran, hay alimentos irritantes que pueden incidir de forma negativa sobre esta condición.

Por lo anterior, una publicación de la Clínica Mayo sugiere que es necesario reducir al mínimo o eliminar la ingesta de ciertas comidas, como las siguientes:

  • Alcohol.
  • Chocolate.
  • Frutas ácidas.
  • Comida picante.
  • Café, té y gaseosas.
  • Bebidas carbonatadas.
  • Productos a base de tomate.
 

2. Reentrenar la vejiga para tratar la incontinencia urinaria

Volver a entrenar la vejiga agrupa sencillas técnicas para fortalecer los músculos involucrados en la micción. Su objetivo es ayudar a establecer pautas horarias para el vaciado de la vejiga. Así, la primera técnica consiste en programar horarios fijos para ir al baño.

Lo ideal, es aguantar las ganas de orinar tanto como se pueda, hasta que el cuerpo se acostumbre al vaciado en los horarios establecidos. Por supuesto, es importante hacerlo de forma gradual: ir cada hora, luego cada dos horas, hasta que puedan pasar hasta intervalos de 4 horas sin fugas.

Otra sencilla técnica permite fortalecer la capacidad para retener la orina. Esta consiste en retrasar un poco la micción cuando se percibe una necesidad urgente de ir al baño. Entonces, primero se retrasa 5 minutos, luego 10 y así sucesivamente hasta sentir más control sobre la vejiga.

3. Hacer ejercicios para el suelo pélvico

Los ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico son un buen complemento para tratar la incontinencia urinaria. De hecho, suelen ser la primera opción de tratamiento cuando los escapes de orina son leves. Los más conocidos son los llamados ejercicios de Kegel, cuya práctica puede hacerse a diario en casa.

En relación a esto, un estudio publicado en Global Journal of Health Science comenta que estos ejercicios son un mecanismo que podría mejorar la calidad de vida y la autoestima de las mujeres con incontinencia urinaria.

¿Qué debes hacer?

  • Para empezar, aprieta y relaja los músculos del suelo pélvico durante 5 o 10 segundos. Luego, descansa el mismo tiempo. Los músculos del suelo pélvico son los mismos que usas para detener el flujo de orina a la mitad. Si no estás seguro de cómo se hace, intenta cortar la orina cuando estés en el baño.
  • Otras actividades, como el puente o elevación de pelvis pueden ayudar. No obstante, hay que centrarse en contraer los músculos correctos.
 

4. Evitar el consumo de tabaco

El consumo de tabaco puede comprometer la función nerviosa de la vejiga. Debido a su alto contenido de componentes tóxicos, fumar puede causar un debilitamiento de los músculos del suelo pélvico. Específicamente, según un estudio publicado en Science Direct, el efecto de la nicotina puede generar contracciones excesivas en la vejiga, lo que se traduce en el aumento repentino de la necesidad de orinar.

Por otro lado, cabe recordar que el tabaquismo puede conducir a un problema de tos crónica, lo que también incide en los escapes de orina. Al toser, la presión abdominal sobre el suelo pélvico aumenta, lo que produce un descenso de la vejiga y la uretra.

5. Evitar las bebidas alcohólicas

Las bebidas alcohólicas ejercen una acción negativa sobre la micción, debilitando las paredes del aparato urinario.

El consumo excesivo de bebidas alcohólicas está relacionado con el debilitamiento e irritación de las paredes de la vejiga, uréteres y riñones. Por eso, a la hora de tratar la incontinencia urinaria lo mejor es evitar la ingesta de este tipo de bebidas. 

El alcohol sobreestimula la vejiga y disminuye la capacidad para retener la orina. Además, al ser deshidratante, podría elevar el riesgo de infecciones urinarias.

¿Cuándo acudir al médico?

Finalmente, cabe recordar que, aunque estos consejos pueden ayudar a tratar la incontinencia, es importante acudir al médico en caso de tener síntomas de esta condición. Esto, ya que cuánto más pronto se reciba un diagnóstico y tratamiento, mejor es el pronóstico.

DIFERENCIAS Y SIMILITUDES ENTRE LA GRIPE A Y LA GRIPE COMÚN O ESTACIONAL

Este virus se transmite de la misma manera que los virus causantes de la gripe estacional, de persona a persona y por contacto directo. Y a primera vista podría parecer hasta un resfriado común pero no lo es.

 

DIFERENCIAS Y SIMILITUDES ENTRE LA GRIPE A Y LA GRIPE COMÚN O ESTACIONAL

Aunque en general los dos tipos de gripes se parecen en muchas cosas, se diferencian en otras:

  • En general, los síntomas de ambas gripes son similares, por ello es muy difícil distinguirlas sin realizar ningún tipo de prueba clínica. De las pocas diferencias que algunos autores pueden destacar son los dolores abdominales, diarrea y fiebre más alta, superando los 39ºC, en la gripe A. Incluso en algunas publicaciones, como la de J.L Viejo Bañuelos, resaltan los síntomas digestivos (náuseas, vómitos o diarrea) como síntomas predominantes en personas con Gripe Porcina.
  • Las personas mayores de 65 años son menos propensas a contraerla. Esto es una clara diferencia con la gripe estacional o común.
  • Estos dos virus, que se transmiten de la misma forma, también se combaten igual, pudiendo aliviar sus síntomas con medicamentoscomo antigripales para el alivio de múltiples síntomas en una sola toma, bebiendo mucho líquido y lo más importante, ¡descansando mucho!

 

Como ya veis, es muy difícil diferenciar los distintos tipos de gripe tan solo con los síntomas. Por eso es necesario tener en cuenta las recomendaciones (pañuelos de usar y tirar, geles desinfectantes, lavarse las manos frecuentemente, evitar el contacto físico con personas enfermas, etc.) y así prevenir tanto la gripe norteamericana como la gripe común o estacional. ¡Que la gripe no te frene!